12 noviembre, 2004

Qué clase de Religión tendremos

La consellera de Educación de la Generalitat ha ido a ver a la ministra del ramo y le ha explicado la propuesta de educación religiosa no confesional que, afortunadamente, ha asumido la Generalitat como propia y que viene avalada por la Asociación UNESCO para el Diálogo Interreligioso.

Lamentablemente la señora ministra Sansegundo se ha limitado a "escucharla" y reiterarle su propuesta de dar clases confesionales de las religiones de "notorio arraigo", principalmente la católica y la musulmana, a partir de 2006.

Ante la falta de voluntad política del Gobierno Zapatero de denunciar el Concordato, parece que el Ministerio opta por ampliar a las cuatro religiones de Primera División los privilegios de que hasta ahora gozaba sólo la Católica Romana.

Con ello sólo conseguiremos mantener una escuela pública en la que se separa a los alumnos por motivos religiosos, lo que transmite una lamentable y peligrosa idea subliminal a los niños y jóvenes, además de mantenerles en la ignorancia, no sólo sobre la religión de su vecino, sino también de otras naciones y civilizaciones con las que tenemos inevitablemente que relacionarnos, dialogar, trabajar y hacer camino juntos. ¿Cómo podremos hacerlo si no sabemos cómo piensan ni cómo estructuran los momentos fundamentales de su vida?